Hay muchas maneras de tomar medicina. Muchos medicamentos se toman por vía oral, es decir, por la boca. Estos están disponibles en forma de líquido o tabletas. Si no te sientes a gusto tragando píldoras, pregúntale a tu médico si está disponible en forma líquida. De lo contrario, averigua si tu médico o enfermera pueden ayudarte a aprender modos de tragar las píldoras más fácilmente.
Algunos medicamentos deben administrarse por inyección:
- Algunos se administran de manera subcutánea, es decir, que se inyectan justo debajo de la piel. Esto es algo parecido a las inyecciones de insulina que reciben los diabéticos.
- Otros medicamentos se inyectan de manera intravenosa (IV), es decir, que se administran a través de un tubo pequeñito que se inserta en una vena. El otro extremo del tubo está conectado a una bolsa que contiene el medicamento y este gotea directamente en el flujo sanguíneo.
- Algunos medicamentos pueden ser inyectados directamente en las articulaciones. Esto se denomina ";inyección en la articulación"; o ";inyección intraarticular";.
Cómo darte una inyección a ti mismo
Las inyecciones IV y las inyecciones en las articulaciones las deben dar los médicos. Sin embargo, algunas inyecciones que se administran debajo de la piel se pueden dar en casa. En este caso, tú o alguien como tu mamá o tu papá pueden aprender cómo hacerlo.
A la mayoría de las personas no les gustan las agujas ni mucho menos darse inyecciones a sí mismas. Sin embargo, muchos jóvenes encuentran que les ahorra tiempo si lo hacen ellos mismos. Si estás aprendiendo a darte inyecciones, aquí te ofrecemos algunos consejos:
Paso 1: debes saber cómo funcionan las jeringas. En la imagen que aparece a continuación se muestran las distintas partes de una jeringa.
Paso 2: debes saber cómo preparar el medicamento y cómo inyectarlo. Mira la animación que sigue sobre cómo dar una inyección.
Paso 3: necesitas saber cuáles son las áreas o zonas de tu cuerpo donde puedes recibir inyecciones. Tu médico o enfermera te dirán cuáles son las mejores áreas para darte una inyección. Puede resultarte útil aplicar inyecciones en diferentes sitios de modo que no irrites la piel usando la misma área para todas las inyecciones. Mira la imagen a continuación para ver dónde puedes inyectar medicamentos.
El metotrexato puede inyectarse en la parte superior del brazo o la parte externa de los muslos. Los medicos biológicos, como etanercept (Enbrel), adalibumab (Humira), anakinra (Kineret), o canakinumab (Ilaris) pueden inyectarse en la parte superior del brazo, la parte externa de los muslos, o el abdomen. Si vas a darte dos inyecciones al mismo tiempo, hazlo a dos dedos de distancia. No te inyecte en un área sensible, amoratada, roja, dura o que tenga cicatrices o estrías.
Recordar tomar tus medicamentos
La mayoría de los jóvenes con AIJ necesitan tomar medicamentos. Sin embargo, a muchos les resulta difícil recordar hacerlo.
Estos son algunos consejos útiles:
- Usa una caja para píldoras semanal con compartimentos para cada día de la semana. Ten los medicamentos disponibles cuando los necesitas. Por ejemplo, quizás sea necesario tener algunos en la escuela o contigo si fuera adecuado.
- Coloca tus medicamentos en un lugar visible relacionado con alguna actividad diaria regular. Una idea puede ser tenerlos en la cocina de modo que los puedas tomar con las comidas.
- Si tienes un teléfono celular, pon una alarma para recordarte cuando sea el momento de tomar un medicamento. Esto puede ser especialmente útil para medicamentos que se toman solo una vez a la semana o varias veces al mes.
- Asegúrate de que tu médico te diga qué hacer si te olvidas de tomar una dosis.
- La mayoría de las personas tienen momentos en los que se olvidan de tomar la medicina o deciden no hacerlo. Si esto ocurre díselo a tu médico o enfermera. No tendrás problemas por darle esta información a tu médico o enfermera. Ellos pueden ayudar a resolver problemas relacionados con las barreras para tomar la medicina si fuera necesario.
- Acuérdate de la importancia de tomar tu medicación incluso si te sientes bien. Algunas medicinas como los FARME y los agentes biológicos tardan un tiempo en dejar de surtir efecto, de modo que si dejas de tomarlos no sentirás ninguna diferencia durante unas semanas. Pero entonces es posible que sufras un rebrote de la AIJ y tengas que comenzar otra vez a desarrollar tus niveles hemáticos.